Piense un instante: ¡NO HABLA POR SU PROPIA CUENTA! Que terrible sería que como predicadores hablemos por nuestra propia cuenta, las cosas que nos parecen, las cosas que se nos ocurren. ¡Cuánta mentira hay en el mundo! ¡Cuántas cosas traicioneras!, por algo dice Juan, "..Pero la unción que vosotros recibisteis de él permanece en vosotros.." y no permitirá que seamos engañados. Pero sepamos esto, la guía del Espíritu debe ser buscada, los santos hombres de Dios del Antiguo Testamento la buscaron, los apóstoles la buscaron, Jesucristo mismo ni siquiera hablaba por su propia cuenta, como él mismo dice: "..Las palabras que yo hablo, no las hablo por mi propia cuenta.." Cristo vivía en una total dependencia de Dios, y siempre estuvo dispuesto primero a oir su voz y luego a hablar.."
Pastor Orlando García (La guía del Espíritu I)
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